Una reforma de entrada inconstitucional

En el articulo 128 de la constitución española dice : "Toda la riqueza del país, en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad, está subordinada al interés general.", por lo tanto la reforma de la constitución para limitar el deficit que nos quiere imponer el PSOE con el apoyo del PP, es de entrada inconstitucional pues en este caso se subordina el interés general al privado. Un deficit es necesario para que un estado financie y mejore sus servicios públicos, y al ponerle coto favorece que estos servicios sean financiados con capital privado o lo que es lo mismo privatizados.


El gobierno ha renunciado desde hace tiempo a financiar el déficit mediante impuestos, a las clases más adineradas, a las empresas más ricas, incluso les ha reducido el tipo para el impuesto de sociedades, de sucesiones, etc; hasta ha llegado a suprimir el impuesto de patrimonio. Y han puesto el énfasis en limitar el gasto reduciendo salarios públicos, congelando pensiones y otras medidas de recorte sobre los derechos de los trabajadores, para resolver el problema de la deuda.


El estado de bienestar que hemos vivido en los últimos años, se convertirá poco a poco en estado del bienestar del capital con el avance imparable de las políticas neoliberales agresivas, y además será "constitucional" para mayor gloria del dios mercado.