
Habría otros posibles modelos a imitar, mirando al norte de Europa en lugar de al sureste asiático, pero este camino es bastante más complejo. Se necesitaría actuar con inteligencia y a largo plazo, lo que dejaría fuera de juego las dos principales características de nuestros gobernantes: su imbecilidad galopante y su constante improvisación según vayan las encuestas. Y esto es impensable aquí. Necesitaríamos gobernantes suecos para conseguir tal cosa.

Además ahora lo tienen mucho más fácil, sólo hay que seguir aplicando las políticas absurdas que nos dictan desde Bruselas y Berlín, basadas en una ideología trasnochada, aunque con ello nos hundan más en la recesión y acrecienten el paro. De esa manera, si hay críticas siempre se puede recurrir a la coletilla "es que hay que cumplir las directivas de la UE".
Y así, pasito a pasito, vamos acercándonos cada vez más al lugar que nos corresponde, el culo del mundo. Un oscuro y tenebroso lugar donde no existe la democracia, cosa que nos hacian creer que teniamos, pero que poco a poco se ha descubierto que era irreal, una democracia que no era tal.

No hay comentarios:
Publicar un comentario