El modo más frecuente de conseguir la movilización de los ciudadanos es mediante la demonización del "enemigo", al que se desfigura por completo, llegando incluso a no considerarlo siquiera un ser humano con el objetivo de que sea combatido con más fiereza. Se suele conseguir con la difusión de mentiras que indignen a la opinión pública.
Para alcanzar estos fines, es habitual recurrir a las operaciones de desinformación, tergiversación de los hechos y la manipulación de las masas a través de los medios de comunicación amigos o aliados, ya que para que tenga éxito debe ser ampliamente divulgada, falseando la realidad tanto como sea necesario.
Gracias por ofrecer tan valiosa información
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